Historia corta y real: Una tortuga a
la fuga!!.
30 de Enero, 2016.
La historia comienza hace 13 años, un
día normal, un jardinero se dispone a su trabajo, como cada mañana
a las 7 de la mañana, pero hoy era diferente.
Ese día, eran sobre las 10:15 de la
mañana, estaba limpiando los jardines de un palmeral entre un bloque
de edificios, cada uno de unas 7 u 8 plantas, y suena el teléfono,
(ése era el aviso de la hora del desayuno), agachado entre unos
arbustos le pareció ver algo caminar “rapidamente” entre las
hierbas del fondo, al estirar la mano para rebuscar, ve un animalito
diminuto, de unos 3 o 4cm de diámetro, era sin lugar a dudas lo
último que esperaba encontrar allí, un tortuga!.
Desconcertado, la recogió y se la
llevó en la mano, iba pensando de dónde había llegado aquella
tortuga a aquel lugar... durante el desayuno, cogió una botella
pequeña y la cortó por la mitad, ya que salía del trabajo sobre
las 14:30 de la tarde y en algún lugar tendría que estar todo el
día...
Cuando la jornada laboral acabó, se
apresuró a buscar la tortuga y llevarla a casa, eran casi 41km hasta
su domicilio, pero ella parecía estar perfectamente, al llegar a
casa la metió en un recipiente amplio con agua y una piedra mediana
donde pudiese salir a coger sol, también le puso alimento, pues
había pasado por una tienda de animales de camino a casa, así que
compró lo que le dio la dependienta, uno de esos botes con gambas
secas en su interior...
A la hora de la merienda, la niña
llegó a casa:
Papi ya estoy en casa gritó!, su
padre le dio la bienvenida y entonces le dijo..
Te tengo una sorpresa en la
terraza.
Ella excitada le preguntó: ¿Qué
es? ¿Qué es?, dando saltos de alegría.
Me encontré un animalito y lo
traje para ti cariño...
La niña saltaba con más emoción
sin decir nada.
Finalmente, el padre le enseñó la
tortuga a su hija, cuando aquello pasó era una niña que venía del
colegio, muy contenta por tener un animalito en casa como mascota,
que cuidó y quiso siempre con locura y
la llamó Churumbel.
Hace tres días.. después de la
reforma de la terraza de sus padres, pasó algo desafortunado...
Churumbel tenía su lugar amplio, con un pequeño lago para nadar,
una zona de piedras para coger sol e incluso una zona abierta de
hierba para que corriese si le apetecía..
El problema fue, que la esposa por la
mañana estaba de limpieza, y la hija ya tiene 21 años, con su
trabajo y sus cosas, pero la tortuga la cuida la señora, su madre...
Durante la mañana estaba suelta, en su
recinto, pero Churumbel decidió ir más lejos y escaparse, se lanzó
hacia la terraza del vecino, que tiene su casa abandonada llena de
hojas grandes de los árboles, de agujeros y de cientos de artilugios
allí amontonados...cerca de 2 metros de altura puede llegar a tener
el otro lado de éste vecino, dónde hay varios perros de gran
tamaño, a saber un pastor alemán y un pastor belga, y para rematar
todo esto se encuentra situado en una ladera, con una pendiente en
su frontal hacia la carretera también a más de 2 o 3 metros de
altura, una carretera de asfalto con doble sentido la rodea en una
curva pronunciada...
Con todo esto descrito, se puede
decir, que es una locura que una tortuga sobreviviera para cualquier
lugar a dónde se quisiera dirigir, y más aún pensar que una vez
escapada la pudiéramos encontrar...
Sobre las 11h de la mañana del
miércoles, la tortuga se perdió de la vista de la señora, ella
ensimismada en la limpieza no notó en aquel momento la fuga, sobre
las 13h de la mañana aún faltaban unos minutos, se dispuso a darle
la comida y un escalofrió la recorrió por todo el cuerpo, miró en
todos lados, removió las hojas de su terraza, las sillas, quitó
cualquier cosa y miró de bajo y todos lados donde pudo... pero no
había rastro de la tortuga, Churumbel se había escapado...
Alarmada, llamó a varios familiares
que vivíamos por allí cerca, dos de nosotros ya nos encontrábamos
allí desde hacía muy poco tiempo, también nos extrañó el no
encontrarla y comenzamos a especular y a buscar por todos lados una y
otra vez, fue el momento de llamar al vecino por teléfono, para
pedirle permiso para entrar en su terraza, aunque desconfiados de
encontrarla allí, nos parecía muy rebuscado el que saltase el muro
y más aún que cayera con tanta ligereza como para seguir andando,
al cruzar con rastrillos y recogedores, comenzamos a quitar todas las
hojas y amontonarlas en una esquina... sin éxito.
La siguiente alternativa, era empezar a
mover los desperdicios y chatarras del vecino, acumuladas por
doquier, y comprobar que no estaba allí.. sin éxito.
Una vez comprobada la terraza,
decidimos salir de allí como descartada, y llamar al otro vecino,
antes de que los perros se la comieran, o algo peor.. decir que el
señor no tubo ningún impedimento, es más nos ayudó en su busca, y
comprobamos que si estuvo allí, ya no lo estaba... habían tubos de
desagües y varios hoyos de excavaciones, probablemente de conejos,
pero a falta de encontrarla y sin saber como hace un agujero una
tortuga... no se descartó las posibilidades de que se colara en el
desagüe o excavara.
Ninguno paró para almorzar, era muy
importante para ellos, el padre regresó del trabajo, y la hija
también horas más tarde, todos buscábamos a Churumbel con ímpetu
en los alrededores, preguntamos a cualquiera que viva o andase por
allí.. parecía que estaba viviendo las típicas situaciones de
desaparecidos, pensando en que las primeras 24h eran las
importantes...
No encontramos nada, los vecinos de los
alrededores estaban avisados y todos nos marchamos a casa...al día
siguiente volvimos y al siguiente... pero nada!. Y ya finalmente la
fe y la esperanza se perdió...
Pero hoy, por la tarde, alguien tocó
en la puerta sobre las 18h, la señora llega del trabajo sobre esa
hora, por lo que una mujer que nadie esperaba al tocar traía lo que
todos buscábamos.. la tortuga!!Churumbel!!
Si amigos! La tortuga regresó a casa
por una desconocida, (bueno conocida del mismo pueblo), pero que
jamás imaginaría que la trajese ella ni nadie... sonriendo le dijo
al abrir la puerta, que si la tortuga era suya, la señora le dijo
que sí que era suya, que dónde la había encontrado que ya hacía 3
días de desaparecida y la daba ya por perdida!!, lloró
desconsoladamente con su tortuga en las manos, era evidente el cariño
que le tenía solo con verla como le pasaba la mano por su caparazón
y gemía como cuando regresa a casa un hijo o un familiar que quieres
y hace años que no ves...
La mujer, aún en la puerta, esperaba a
que la señora se recompusiera... perdona! Pasa! Pasa! Qué mal
educada que soy!, se avergonzó y la mandó a pasar.. ofreciéndole
una taza de café y unas pastas en agradecimiento y le pidió por
favor que le contase...
- Me llamo Ana, venía con mi marido
por la carretera secundaria hacia mi casa, en mi coche, y de repente
mi marido me dijo para para!, creo que eso es una cartera, algún
caminante se le puede haber caído, (él que poco ve), sólo veía
algo negro en el suelo, pero yo al parar el coche vi que era algo
negro con unas patitas y al apartar el coche en la carretera y
acercarme no daba crédito a lo que estaba viendo!, pensé : “ por
una carretera dónde no pasa nadie, ni vive nadie, a kilómetros del
pueblo más cercano, cómo había aparecido una tortuga allí!”.
La cogí, se la enseñé a mi marido, y
decidimos llevarla a casa, hasta que encontré un lugar la tuve con
las gallinas en una cerca, con su recipiente de agua, comida y una
piedra...
Me dirigí al pueblo, y pregunté a
todos los que conocía, hasta que mi primo me dijo: “yo sé de
quién es! es de mi vecina!,que la perdió el miércoles, se le
escapó de su terraza”, y hoy cuando salí del trabajo la cogí
para traértela lo antes posible, pues él me dijo que estabas
angustiada con su pérdida y que la habías buscado todos éstos
días...
Ella aún estaba atónita con la
historia, pues sabiendo dónde la había encontrado a varios
kilómetros de distancia, era imposible que una tortuga del tamaño
de una caja de DVD, con esas patitas tan pequeñas, pudiera avanzar
tan rápido y tan lejos!... la única explicación era que saltó la
terraza a la carretera, y cruzó el asfalto hasta bajar por medio de
la ladera, montaña abajo, hasta llegar a aquella carretera
secundaria, por medio de abruptas piedras, zanjas y ondas hendiduras
por dónde el agua circula hasta llegar al mar... se orientó al
sol.. o a su propio radar e instinto animal..
Y finalmente, la tortuga volvió a
casa!! con algunas heridas de guerra pero en perfectas condiciones, y
ya está toda la familia de nuevo contenta... lo que se hace por un
animal.. por un ser vivo y querido, sea cuál sea... y lo que se
aprende de ellos... es extremadamente magnífico.
Moraleja, no hay que perder la fe y la
esperanza, siempre queda eso en los corazones, además no hay que
infravalorar ni a los animales ni a las personas, pues cualquier día
sea quién sea te puede dar una sorpresa, de gratitud, de cualquier
forma que no esperas, incluso ya ves una tortuga te puede dar una
lección!! ;)
Gracias por leer amigos! Hasta aquí la
historia de nuestra tortuga fugada! Saludos!!